La Sintergética es un modo de aproximarse a la vida, a la salud, a la muerte, a nuestra psicología, a nuestros sistemas orgánicos.
Viene de síntesis, que significa integrar, unir, correlacionar, unificar. Parte de una concepción de la salud que es un poco diferente a la habitual.
Primero, la salud no es un estado, porque la vida no es un estado. La vida es un proceso de cambio permanente.
Segundo, este proceso no es perfecto, debido a que nuestra naturaleza, en constante evolución, no es perfecta.
Por lo tanto, la salud no es un estado perfecto de bienestar, entre otras cosas, porque el bienestar se refiere al estar, pero sobre todo, se refiere al ser que somos.
Cuando nuestro ser, nuestra esencia, permea todos los estados de nuestra conciencia, nuestro campo físico, nuestro campo emocional, nuestro campo mental, nuestra personalidad, nuestro campo de relaciones humanas, esa conectividad entre los distintos estados lo podemos denominar de una manera: Integridad.
Tenemos salud cuando tenemos integridad física, emocional, mental y relacional.
Cuando tenemos serenidad, cuando tenemos alegría, cuando nuestra ira fluye y no se queda reprimida, cuando nuestros miedos no nos dejan congelados, conquistamos ese nivel de resonancia armónica o de unidad, que es integridad.
Lo mismo ocurre con nuestra mente. Si nuestra mente se serena, nuestros pensamientos están en correspondencia con el mundo de las ideas, entonces tenemos integridad a nivel mental.
Pero además, si hay un buen diálogo entre nuestra mente, nuestras emociones, nuestro cuerpo físico, y todos ellos se integran en nuestra persona, nuestro carácter, nuestro temperamento, nuestra personalidad, entonces somos una persona saludable.
Pero no basta con ser una persona saludable, porque somos más que personas, porque nuestra personalidad es un instrumento de un habitante interior, del ser que somos, del alma que somos. Esa integridad y armonía también concierne a un nivel que es espiritual.
Así que un día, tuvimos un sueño.
¿Y si más allá de la acupuntura, de regular nuestro campo de energía, de la medicina que llega hasta la biología molecular, de la psicología que pretende nuestra armonización emocional, podemos encontrar cómo vivir en realidad, como seres saludables?
Entonces iremos conquistando un nivel de salud superior, un nivel de salud integral.
¿Y si más allá de tener la satisfacción de nuestras necesidades biológicas, emocionales, de pertenencia, de identidad y de realización, pudiésemos acceder a una necesidad humana esencial: la necesidad de sentido, la necesidad de trascendencia, la necesidad de encontrar un propósito para nuestra vida?
Entonces, construimos una salud e integridad.
Esto es la Sintergética. No se limita a una disciplina especializada, sino que abarca la totalidad de la experiencia humana.
Es un proceso, es una metodología que nos lleva a conquistar esa integridad en todos los planos, no profundizando tanto en la parte, sino en la totalidad.
Nos humanizamos como médicos para ver una humanidad en el contexto de hoy, lleno de significado en sus relaciones, con uno mismo, con los otros, con la naturaleza, con la tierra.
Trabajamos para restaurar la integridad y la unidad en todos los niveles de nuestra existencia, promoviendo la comunicación y la resonancia armónica entre nuestras diferentes dimensiones de conciencia.
Es una invitación a sincronizarnos con nuestro pasado y nuestro futuro para vivir plenamente en el presente, en armonía con la evolución de nuestra propia conciencia, que en el ser humano se ha convertido en ciencia de nosotros mismos, en conciencia reflexiva.
Este es el espíritu de la Sintergética.
Dr. Jorge Carvajal