Hacia Una Medicina Energética

Respirar, comer, soñar, pensar, relajarse, hacer todo y aun reposar, implica el empleo de energía. Cada emoción, todo movimiento, el sueño, y hasta el más tenue de nuestros pensamientos se asocia al movimiento de la energía. No la podemos medir directamente, pero podemos reconocerla por sus efectos…